Ya estés desarrollando un programa de formación corporativo o planificando un curso nuevo para tu equipo, crear un programa de formación eficaz implica saber qué necesitan aprender los alumnos, por qué necesitan aprenderlo y cuál es la mejor forma de hacerlo. Por suerte, existe un proceso sencillo llamado «análisis de las necesidades de aprendizaje» (LNA, por sus siglas en inglés) que puede ayudarte a determinar todos estos elementos.
En este artículo se describe qué es un LNA y los factores clave que se deben tener en cuenta a la hora de diseñar un programa de formación.
¿Qué es un análisis de las necesidades de aprendizaje?
Es una forma sistemática de analizar el desequilibrio entre los objetivos empresariales y el rendimiento actual. Una vez lo hayas identificado, podrás elegir la solución de aprendizaje que mejor cubra esa carencia. Los LNA te ayudan a revisar los datos de rendimiento existentes, elegir la solución de aprendizaje más adecuada, establecer objetivos y preparar la evaluación posterior al proyecto.
¿Por qué es esencial llevar a cabo un análisis de las necesidades de aprendizaje para crear buenos programas de formación?
Resuelve el problema a la primera
Una formación diseñada de forma precipitada suele dar malos resultados. Un LNA identifica el verdadero problema y permite diseñar una solución acorde.
Formación es sinónimo de inversión: asegúrate de conseguir ese ROI
Diseñar una solución de aprendizaje conlleva tiempo, dinero y recursos. Un análisis exhaustivo del problema te permite medir el éxito de la formación, lo cual implica obtener la aprobación de las partes interesadas y demostrar que has hecho un buen trabajo.
Cuando el equipo tiene un buen rendimiento, también es más feliz
Un análisis exhaustivo de las necesidades de aprendizaje te permite diseñar programas de formación con los que tu personal alcanzará su máximo rendimiento.
Consejos para un buen análisis de las necesidades de aprendizaje
Define el problema y asegúrate de que todo el mundo esté de acuerdo.
No todos ven las cosas de la misma forma. Identifica el motivo por el que quieres realizar un LNA. ¿Cumplimiento de normas? ¿Diseñar o rediseñar un curso de aprendizaje? ¿Resolver un reto de formación? Cuando sepas por qué quieres realizar un LNA, te será más fácil identificar las áreas que examinar. No olvides recopilar datos actuales sobre el rendimiento y compararlos con los objetivos empresariales. Esto te ayudará a crear metas y marcadores de evaluación.
La formación no es la solución para todos los problemas.
Supongamos que hay una tarea con 250 códigos de entrada y que el equipo se suele equivocar de código. De poco serviría una formación en este caso: es difícil recordar tantos códigos. La mejor solución sería una herramienta de ayuda.
Conoce a los alumnos.
Si optas por la formación, asegúrate de que se adapte a las necesidades de tus estudiantes. Pídeles su opinión en entrevistas y grupos de debate para entender cómo tiene que ser la formación para serles de ayuda. ¿Qué funciones desempeñan? ¿Por qué no cumplen los objetivos? ¿Qué idiomas hablan? ¿Tienen tiempo para dedicarlo a la formación?
Apunte final sobre los LNA
Llevar a cabo un análisis de las necesidades de aprendizaje puede resultar agobiante, sobre todo si no se dispone de un cierto margen de tiempo. Pero con la ayuda y los conocimientos adecuados, especialmente para crear una formación mutlilingüe funcional, podrá convencer a las partes interesadas de que su solución es la correcta.